domingo, 3 de agosto de 2014

            1. Fußballclub Union Berlin




El 1. Fußballclub Union Berlin es un club de fútbol alemán de la capital Berlín. El club fue fundado el 20 de enero de 1966 sobre la base del FC Olympia Oberschöneweide, club fundado en 1906.

El equipo disputa sus partidos como local en el Stadion An der Alten Försterei, situado en el distrito berlinés de Köpenick, y juega actualmente en la 2. Fußball-Bundesliga.




El club es uno de los dos equipos de la capital alemana que lleva el nombre Union surgido durante la Guerra Fría y jugó en la República Democrática Alemana, mientras que el Sport-Club Union 06 Berlin jugaba en el Oeste.

Union Berlin es conocido principalmente por sus fans. El himno de los fans del club es "Eisern Union" cantado por Nina Hagen.

Historia

El nombre 1. FC Union Berlin fue utilizado por dos clubes de fútbol que compartían un origen común en el FC Olympia Oberschöneweide, fundado en 1906 en el distrito Oberschöneweide de Berlín. El equipo tomó el nombre de Union Oberschöneweide en 1910. El Union fue uno de los primeros clubes de Berlín, en el período de entreguerras, regularmente ganó campeonatos locales y compitió a nivel nacional, incluyendo una aparición en la final del campeonato alemán de 1923 que perdió 0-3 con el Hamburgo SV.

Desde el principio el equipo fue apodado Schlosserjungs ("trabajadores metalúrgicos"), debido a su entonces uniforme totalmente azul, que recordaba a la típica ropa de trabajo usada ​​en las fábricas del distrito industrial de Oberschöneweide. El himno popular de los aficionados del Union, "Eisern Unión!" ("unión del hierro" o "los del hierro"), también surgió en este momento. Desde su fundación, el club tenía una imagen clara de clase obrera, en contraste con otros clubes locales con orígenes de clase media, como el Viktoria 89 Berlin, Blau-Weiß 90 Berlin, BSV 92 Berlin o Tennis Borussia Berlin.

En 1933, el fútbol alemán se reorganizó bajo el Tercer Reich en 16 divisiones superiores conocidas como Gauligen. Oberschöneweide pasó a formar parte de la Gauliga Berlin-Brandenburg, donde, por lo general, obtuvo resultados discretos. Descendieron en 1935 y volvieron a jugar en primera división en 1936 después de una ausencia de sólo una temporada. En 1940, el equipo terminó primero en el Grupo B de la división y luego derrotó al Blau-Weiss (1-2, 3-0) para ganar el título de la división general. El club avanzó a los play-off nacionales donde fueron eliminados por el Rapid de Viena en la ronda de apertura de grupo (2-3, 1-3). El Union volvió a descender en 1942 y jugó la final de la temporada Gauliga en 1944-45, que fue más corta por la guerra.

Después de la Segunda Guerra Mundial, las autoridades aliadas que ocuparon el país ordenaron la disolución de todas las organizaciones en Alemania, incluidos los deportes y las asociaciones de fútbol. Un nuevo Grupo Municipal de Deportes llamado SG Oberschöneweide se formó a finales de 1945 y jugó en la Liga de la Ciudad organizada inmediatamente después de la guerra que tuvo cuatro departamentos regionales. El equipo no se clasificó a la recién creada Berlín Oberliga (I) en 1946 después de una mala temporada, pero fue ascendido en 1947, ganó el título de la división y de inmediato recuperó el estatus como SG Union 06 Oberschöneweide durante la temporada 1948-49.

El club terminó la temporada 1949-50 en el segundo lugar en Berlín y se clasificó para participar en las rondas finales nacionales. Sin embargo, la escalada de tensiones de la Guerra Fría llevó a las autoridades soviéticas a denegar la autorización al equipo para viajar y participar. Dos equipos del Union emergieron después, pero la mayoría de los jugadores y entrenadores huyeron hacia el Oeste para formar el Sportclub Union 06 Berlin que participó en el partido de play-offs previsto en Kiel ante el Hamburgo SV, perdiendo 0:7.

El resto de jugadores en el Este continuó como Union Oberschöneweide, mientras que un número de jugadores que habían huido hacia el Oeste para formar el SC organizó un tercero llamado Berliner Ballspiel-Club Südost. El equipo del Oeste era un equipo fuerte hasta la construcción del Muro de Berlín en 1961, atrayendo a multitudes enormes en el Olympiastadion. La división de la ciudad condujo a un cambio de fortuna para el club que juega hoy en las divisiones inferiores con escaso público.

Fundación del 1. FC Union Berlin


La rama oriental del club pasó a través de una serie de cambios de nombre: Union Oberschöneweide (1950), BSG Motor Oberschöneweide (1951), SC Motor Berlin (1955), TSC Oberschöneweide (1957), TSC Berlin (1963) y finalmente se convirtió en el 1. FC Union Berlin en 1966. El Union desarrolló una amarga rivalidad con el equipo de la Stasi del Dynamo Berlin. Mientras que sus grandes rivales locales ganaban diez títulos consecutivos en circunstancias muy dudosas, el Union pasó la mayor parte de la década entre la Oberliga y la DDR-Liga como un equipo ascensor, en gran parte debido a la política del gobierno de la Alemania Oriental de favorecer a los clubes de la 'élite' a costa de clubes 'civiles' como el Union. El equipo berlinés oriental consiguió ganar la Copa de Alemania del Este en 1968, cuando derrotó al FC Carl Zeiss Jena —otro de los grandes clubes de la República Democrática Alemana— 2-1 aunque perdieron la oportunidad de lograr su segunda copa en 1986 ante el 1. FC Lokomotive Leipzig por un severo marcador de 1-5.


Después de la reunificación alemana en 1990, el equipo mantuvo la evolución positiva en el campo, pero casi llegó al colapso financiero. El club salvó aquellas dificultades y encontró un patrocinador, pero sólo después de ganar su división en 1993 y 1994 donde cada vez se le negaba el permiso para jugar en la 2. Bundesliga debido a sus problemas financieros. El club volvió a pasar graves dificultades económicas en 1997.



El Union de nuevo estuvo a punto de ascender a la 2.Bundesliga en 1998-99 y 1999-2000. Finalmente lograron su objetivo en la temporada 2000-01, bajo las órdenes del entrenador búlgaro Georgi Vasilev, ganando fácilmente la Regionalliga Nord (III) y subiendo una división para convertirse en el segundo equipo berlinés más popular tras el Hertha Berlín de la Bundesliga. Ese mismo año apareció en la final de la Copa de Alemania, donde perdió 0-2 ante el FC Schalke 04, y avanzó hasta la segunda ronda en Copa de la UEFA antes de ser eliminado por el equipo búlgaro del PFC Litex Lovech.


El club cayó a la Regionalliga Nord (III) en 2004-05 y luego a la NOFV-Oberliga Nord (IV) en 2005-06, pero ha vuelto a jugar tercera división después de hacerse con el título de Oberliga. En 2008-09, el Union se convirtió en uno de los clubes fundadores de la nueva 3. Fußball-Liga, y su campeón inaugural, asegurando el primer lugar y el ascenso a la 2. Fußball-Bundesliga, el 10 de mayo de 2009.


martes, 26 de noviembre de 2013

          El movimiento hooligan alemán



COMIENZOS:

El final de los años 60 y el comienzo de los años 70 marcaron el inicio real de los aficionados alemanes. Por supuesto, al igual que sus vecinos continentales, Alemania ya comenzaba a contar en las gradas con aficionados que apoyaban activamente a su club y comenzaron a encontrarse en una parte específica del estadio. Este período marca el nacimiento de los partidarios de la animación en masa y de los primeros fan-clubs, así como el surgimiento de una identidad propia como aficionados. Podemos estimar que los primeros clubs de fans en ver la luz fueron los de la Seerose Nurnberg (1969), el Jungen Bochum (1972) y la Sudkürve del Bayern de Múnich (1973). Estos 3 grupos históricos siguen existiendo.
Pronto los clubs de fans se multiplicaron en todo el país y la escena comenzó a desarrollarse a un buen ritmo. Los principales clubs de fans solían ser una banda de amigos del mismo barrio o de una ciudad que se unían para apoyar activamente su club de fútbol favorito. Poco a poco y con el nacimiento de estos fan-clubs, se fue agrandando la masa social de los equipos y surgió, de manera inevitable, las federaciones de Fan-Club, que no son otra cosa que la versión alemana de nuestras rancias Federaciones de Peñas. Por ejemplo el Schalke 04 comenzó en sus inicios contando con 8 clubs y ahora tiene más de 850.
Un verdadero cambio de cultura futbolera se formaba en Alemania, donde el contingente de aficionados dispuestos a seguir a su equipo lejos de casa comenzaba a desbordarse. Desde mediados de los años 70, como en Inglaterra, se organizaban trenes especiales para permitir a los aficionados viajar para ver los partidos foráneos con más facilidad. En 1991, 40.000 aficionados del Kaiserslautern fueron a Colonia para ver a su club de ganar el título de la Bundesliga.
En esos años, los aficionados alemanes seguían el modelo británico. A pesar de la existencia de numerosos clubs de fans en los laterales de los estadios, lo más importante es la entidad "Kurve", que reúne a los más ardientes partidarios y permite formar una "comunidad" de todo el club. En el Kurve, no hay una verdadera estructura de la animación: las canciones son espontáneas, a veces marcadas por bombos, y la entrada de los jugadores en el terreno de juego va acompañada de los clásicos bufandeos, o en algunas aficiones, incluso, de banderones.
El estilo es fundamental para la reputación de los aficionados alemanes en su propio país y a través de las fronteras. Inspirado en cierto look heavy, el aficionado alemán de la época solía ir con una chaleco vaquero, cubierto de parches donde proclamar el amor a su equipo, su odio a los equipos enémigos, su colegueo con aficionas amistosas o sus opiniones políticas.

HOOLIGANS EN ALEMANIA:

Con la aparición de los fan-clubs, también surgen al unísono los primeros incidentes entre aficiones, especialmente en aquellos partidos con fuerte rivalidad regional, destacando especialmente la zona del Ruhr. La violencia es espontánea y no organizada y se suele limitar a algunos golpes y/o bufandas robadas, aunque se vean inmersos en las mismas, en algunos casos, hasta cientos de personas.
Sin embargo, a comienzos de los años ´80, las cosas cambian. Comenzaron a aparecer los primeros skinheads en las gradas y los alemanes empezaron a interesarse, de una manera mucho más activa que años anteriores, por el fenómeno hooligan que por aquella época arrasaba en toda Inglaterra. Pero, al contrario que en Inglaterra donde las firms solían ser más informales, los nuevos grupos alemanes querían mantener una cierta estructura y un vinculo mucho más cercano a su club. Este camino no fue exento de problemas, por ejemplo, en 1983 surgieron los Rheinterror en Leverkusen para apoyar al Bayern de la localidad y el club hizo presión para que los hooligans locales no tuvieran un nombre tan explícito. Finalmente, los gamberros de Leverkusen cedieron a las presiones y cambiaron su nombre por el de Lev-Szene.
Muchos notas de extrema derecha comenzaron a infiltrarse en el reciente movimiento alemán: así surgen, por ejemplo, el Adlerfront en Frankfurt, Borussenfront en Dortmund, y así sucesivamente. Muchos de estos grupos, sin embargo, pasaron sin pena ni gloria y muchos no eran reconocidos en sus respectivos Fan-Clubs.
En octubre de 1982, los enfrentamientos entre los aficionados de la ciudad de Hamburgo y Werder Bremen terminaron de manera trágica. Un joven fan del Werder Maleika Adrian, de 16 años, fue asesinado por una piedra lanzada por un seguidor del Hamburgo. Esta es la primera muerte en la historia de la Bundesliga. Esto no impedirá que los incidentes se multipliquen a lo largo de la decada. También lo hace la represión policial y el acoso de las autoridades por lo que en años posteriores los hooligans alemanes se volverán más sofisticados y darán menos el cante a la hora de buscar enfrentamientos.

Para los más extremistas, la selección nacional alemana reflejaba el poder de toda una nación. Torneos internacionales daban lugar a grandes concentraciones de vándalos de diferentes clubes y diversos países. Durante la Eurocopa del 1988, los alemanes se enfrentaron duramente a los ingleses en Düsseldorf. Posteriormente, las principales competiciones internacionales se tradujeron en una importante movilización por parte de la escena alemana. De hecho, diez años después, en 1998, 2 hooligans alemanes golpearon al gendarme Daniel Nivel en Lens, eran seguidores del Hamburgo SV.
"LA AMISTAD PARA SIEMPRE" 
Uno de los aspectos más interesantes de la escena alemana es la existencia de fuertes vinculos de amistad entre hinchadas de diversos equipos. Muchas de ellas comenzaron a gestarse a finales de los ´70 y comienzos de los ´80.
Algunas surgen como una defensa involuntaria de los seguidores frente al vandalismo de los hooligans. Por ejemplo, los seguidores del Colonia se hicieron colegas de los del St. Pauli, desde un partido de la temporada 1977/78. Aquel día, el Colonia ganó el partido y se convirtió en campeón de la Bundelisga, a costa de un St. Pauli ya descendido jornadas atrás. Los aficionados de ambos clubes montaron una gran fiesta para celebrar el título de los primeros y muchas amistades personales se forjaron desde ese momento.
Pero no sólo se producen amistades masivas entre hinchadas diversas. Los grupos hooligans también comienzan a organizan alianzas en función de amistades o enemistades varias, como por ejemplo "la Alianza del Norte" entre Hamburgo, Hannover y Bielefeld. Una de estas amistades entre los grupos hooligans del Nurnberg y del Schalke 04 posteriorment se extendió al resto de ambas aficiones.
Algunas amistades fueron tan enrevesadas que acabaron mal como las del Hamburgo y el Nurnberg en 1972. Resulta que el Nurnberg jugaba un partido en casa frente al Schalke 04 y estos se encontraban "hermanados" con los aficionados del Bochum, que a su vez, tenían buenas relaciones con los del Bayern de Munich. Esto fue motivo suficiente para que los seguidores del Bayern dieran la espalda a sus colegas de Nunrnbeg en este partido y el motivo de la ruptura de relaciones entre ambas hinchadas.

La comercialización de algunas amistades y el deseo de "hacer caja" de algunos listos acabó con algunas de las más antiguas amistades alemanas como la del Kaiserlautern y el Werder Bremen o el Sttutgart y el Eintracht de Frankfurt.

BUNDESLIGA CONTRA OBERLIGA:

La Alemania de la Guerra Fría se vivió en dos mitades divididas: la occidental y la oriental: la Bundesliga y la Oberliga. La importancia política y social del fútbol en ambos "paises" propició también piques entre clubs y, por supuesto, amistades entre las fronteras. Y un fenómeno más curioso aún: debido a la debilidad de la zona oriental en lo que a materia futbolística se refiere muchos ciudadanos del este tenían, aparte de su equipo natal, su equipo en la zona occidental.
A partir de los años ´80, el fenómeno hooligan decrece en toda Alemania, en particular en la zona occidental, pero no es así en la zona Oriental, donde el fenómeno se encontraba en un ligero auge. De hecho, los aficionados organizados al fútbol en la RDA eran muy mal vistos por algunos mandatarios del Partido Comunista. Asimilaban que el fútbol, en un estado socialista, no era más que un sinónimo de caos y de disturbios. Esto provocó que los aficionados más radicales de algunos clubs convirtieran esas "pesadillas" en realidad, en particular los hooligans del Dynamo de Dresden y los del CFB Berlin.
Con la reunificación alemana se intentó fomentar una paridad ficticia entre la parte comunista y la capitalista, con el tiempo, se ha visto que esta igualdad no es más que propaganda y promesas vacias. Lo que en un principio no se vió en otros aspectos de la sociedad, si que se vió claramente en el fútbol donde sólo el campeón y el subcampeón de la zona oriental pudieron competir en la Bundelisga, mientras que los seis siguientes tuvieron que conformarse con hacerlo en la segunda división.
Es a partir de esta reunificación cuando en la antigua RDA explota de forma increible el tema de la violencia en los estadios. La ley se mostraba con muchas lagunas y dificultades para hacer frente a los grupos hooligans que venian del este. En particular, se mostraban muy bravos y contudentes los hooligans de los siguientes equipos: Dynamo de Dresden, Hansa Rostock, Magdeburgo y Berlin FC.
Debido al bajo nivel de clubes de Alemania Oriental, la Liga Regional de Oriente (tercera división), resulta ser la más activa en lo que a altercados e incidentes se refiere. Así, el partido del VfB Leipzig-Dynamo Dresden en 1993-94 se considera como el partido más "caliente" de la decada de los ´90, con impresionantes peleas y la casi total destrucción de la zona visitante. Los seguidores de la zona occidental se mostraron muy cautos en aquellos años en sus viajes a la zona oriental, de hecho, casi ninguna hinchada viajaba y la que se atrevía a hacerlo, como la del St. Pauli a Rostock en 1990 lo pasaba muy mal debido a la hornada de nazis y boneheads varios que acudían al partido con intenciones no muy amistosas. Tras ese partido en Rostock, los fans del St. Pauli suspendieron sus viajes hacia el Este, hasta 1993.

A partir de la decada los ´90, el modelo ultra comienza a despuntar en Alemania. La fuerza de la cultura tradicional de gradas en el país había hecho hasta entonces impermeable el modelo alemán a la influencia latina que se producía en la mayor parte de Europa: Francia desde hacía 10 años, el Estado Español desde hace 15, Italia desde hacía 25, etc...Sin embargo, en tan sólo una década el modelo ultra crece y se expande en todas las divisiones, para convertirse en uno de los más fuertes actualmente en todo el continente europeo.

LOS PIONEROS:

Muchos consideran que las razones para la llegada del movimiento ultra a Alemania se encuentra en el hecho que muchas aficiones alemanas hacían para seguir a sus equipos en las competiciones internacionales, particularmente en sus viajes a Italia. Los primeros "tifos" con globos o con cartulinas se comienzan a extrapolar en aquellos años a las gradas alemanas, así como cierta organización en lo que al tifo se refiere.
Tomemos como ejemplo la creación de los "East Side" del Werder Bremen en 1997, donde se produce todo un relevo generacional. El "East Side" fue muy importante porque fue uno de los primeros proyectos de grupos ultras que surgían con el fin de aislar, aún más si cabe, a los hooligans locales que ya entonces, en el Ostkurve, tenían bastante poca fuerza. A la reunión fundacional en el verano de 1997, sólo acudieron 25 personas de todo el fondo, pero a pesar del escepticismo del propio equipo y del resto de seguidores del Werder, la primera piedra estaba puesta y el grupo siguió hacía adelante.

Aunque, las primeras experiencias ultras, datan de finales de los ´80 como los "Fortuna Eagles" de 1986 que animan al Fortuna Colonia (segundo equipo de la ciudad) y aún en activo, o los Mad Boyz del Bayern Leverkusen en 1990, no es hasta mediados de los ´90 cuando comienzan a proliferar grupos por todas partes. En 1994 surgen los Ultras Nunrbeg. En 1995 surge un grupo en el Eintracht de Frankfurt, que dos años después cambia el nombre por el actual de Ultras Frankfurt. Surgen, desde entonces, otros grupos como Wilde Horde del Colonia, los ultras del Friburgo o los Munich Manicas del Bayern de Munich, por citar sólo algunos ejemplos.
En los años siguientes el fenómeno se extiende a velocidad de vertigo. No importa en que lugar del país (oriente u occidente) y en que división se encuentren los equipos. Desde las ligas regionales a la Bundesliga, se crea un espectácular estallido de grupos en todos los estadios. Internet desempeña un papel muy importante en esta rapida expansión.
Sin embargo, no se puede cambiar el modelo de vivir el fútbol tradicional alemán durante los últimos 30 años, en apenas un par de años. Muchas costumbres continuaron prevaleciendo y muchos grupos ultras en esos comienzos no eran más que Fan-club´s organizados y dedicados unicamente al tema de la animación en el estadio, creación de tifos y muy poquito más. No se podía hablar por aquel entonces de grupos ultras al 100%, pues otros aspectos (no básicos, pero si presentes) de la cultura ultra como la violencia entre enémigos o la idea de un grupo guía en la kurve, todavía no se daban entre estos grupos alemanes.
En los comienos, por otra parte, los grupos alemanes se limitan a copiar todo lo que ven del extranjero, pero con resultados bastante buenos. En cierta manera, debido a la disciplina y la organización típica alemana, muy lejana del mayor espontanéismo e indisciplina de los ultras del sur de Europa. Se comienzan a ver coreografías en las que se involucra a varios miles de personas, favorecidos además, por unos estadios acordes al siglo XXI, amplios, funcionales, sin pistas de atletismo, y con muchas posiblidades para la creación de tifos.

EN EL CORAZÓN DE LA AFICIÓN:

El año 2000 marca el verdadero inicio de los grupos ultras, tal y como los conocemos en el resto del continente. Los grupos comienzan a crecer y a tomar nota del poder que pueden llegar a ejercer sobre el resto de la hinchada. Se comienzan a organizar los canticos al estilo italiano, con un megáfono o micrófono para guiar a toda la curva en post de cantar una única canción al unisono, bien es cierto, que la mayoría de los canticos siguen siendo los tradicionales del fútbol alemán y muchas veces estos están influenciados sobre el desarrollo del partido, esto es, si el equipo va perdieron la kurve, por lo general, se queda muda, pero si el equipo va ganando y realiza un buen juego, la situación cambia.

Mientras la organización y el número de los grupos sigue en aumento. Los ultras del Gelsenkirchen (por citar a un grupo de categorías bajas) tienen en la actualidad unos 350 miembros, los Schickeria Munchen o los Ultras Frankfurt presumían la temporada pasada de tener 700 socios cada uno. Otros grupos, como los Comando Cannstatt del Sttutgart son los "culpables" de reactivar todas las actividades de su kurve entera e invertir la trayectoria descendiente que tenían los seguidores del Stuttgart antes del nacimiento de su grupo ultra. En Dortmund, "The Unity" data de 1997, pero en un fondo tan grande es imposible aunar a tanta gente en un sólo grupo, por lo que hay repartidos por todo el fondo grupos ultras como los "Desperados" u otros fan-club´s que se acercaron al fondo de "The Unity" por ser el sector más caliente de la afición del Borussia de Dortmund. Como una muestra de unidad en el fondo está colgada desde el techo la siguiente pancarta: Gelbe Wand Sudtribune Dortmund", Gelbe Wand significa Muro amarillo.
Es en esta relación entre grupos ultras y fan-club´s "normales" donde se ve una clara diferenciación en el modelo alemán y otros como el francés o el italiano. Y es que, por ejemplo, en Francia nunca existieron las peñas como tal y los primeros que asumieron la organización de los aficionados fueron los ultras. En Italia, los ultras gozan de tal autonomía que hacen o dejan de hacer cualquier cosa en función de sus propias convicciones, mientras que en Alemania, cualquier cosa que realicen los ultras del equipo, tiene que estar "apoyada" en mayor o menor medida por algunos otros Fan-club´s.

Con el crecimiento de los grupos ultras alemanes, también comienza a crecer al unisono una represión que se ceba con los grupos principales del panorama. Por ejemplo, 59 miembros de los "Schickeria Munchen" tienen prohibia la entrada a la final de Copa de Alemania de hace unos años por su presunta participación en unos incidentes ocurridos durante la temporada en Duisburgo. Esto llevó a los ultras del Bayern a intentar boicotear dicha final y a suspender sus actividades durante un tiempo prudencial.
Otro caso es de los ultras del Frankurt, que se encerraron en su estadio en respuesta a la prohibició de acceso al mismo para 30 de sus miembros durante 3 años y medio acusados de realizar daños en el centro de la ciudad e Colonia, en Marzo del 2006.
Todos estos episoidos de represión a los grupos alemanes han llevado a la creación de subgrupos y grupos pequeños por cuestión de afinidad, mentalidad, edad o lugar de residencia, lo que ha llevado a la disgregación de algunos grandes grupos. Sin ir más lejos, los propios "East Side" del Werder Bremen se disolvieron hace dos temporadas por este motivo.

Una base fundamental para crear una identidad propia como movimiento es la originalidad, su capacidad para destacar entre lo que se hace en otros lugares por otras personas. Esta es la principal crítica al movimiento alemán. Esta falta de originalidad la podemos ver en el propio nombre de los grupos. Centrándonos en una región cualquiera de Alemania, por ejemplo en el Rhur, podemos encontrarnos a los Ultras GE del Schalke 04, a los Ultras Monchengladbach, a los Ultras Bochum, a los Ultras Essen, a los Ultras Dusseldorg y a los Ultras Leverkusen.
Son muy raros los casos donde el nombre del grupo es original, y mucho menos que el nombre esté en alemán. Podemos destacar como uno de los más originales el de los "Schickeria" del Baryen, que viene de una lejana historia de la capital de Baviera protagonizada por un sitio llamado "Schickimickis", cuyos habitantes eran descritos como la gente más inteligente de todo su entorno. El nombre de este grupo, formado en el 2002, por tanto no deja de ser curioso, original e intrasferible porque "juega" con algo intrínseco a la ciudad de Munich. Otros nombres originales serían los de "Wilde Horde", los "Phoenix Sons" o los "Harlekins" del Hertha de Berlin.

EL DESAFIO DEL FÚTBOL MODERNO Y LA REPRESIÓN:

Los ultras han ido cambiando, poco a poco, su papel "neutro" en lo que a algunas cuestiones se refiere. Por ejemplo, han comenzado a oponerse a decisiones de su club, de la federación de fútbol alemana o de otros organismos del fútbol nacional e internacional.
A nivel de club, algunos Ultras se han opuesto abiertamente a cuestiones tales como el cambio en los colores de la camiseta o en el nombre del estadio. En Bremen, han desarrollado una iniciativa "No naranja" para criticar la intrusión del naranja en su camiseta tradicional verde y blanca. En Nurnberg, realizaron una campañara para evitar el cambio de nombre de su estadio de Max Morlock, un ex-jugador del club por el de Easycredit, una entidad financiera. Los ultras del Bochum también se movilizaron la temporada pasada para evitar el cambio del nombre de su estadio de Rhurstadion a Rewirpowerstadion.

Muchas hinchadas se han movilizado en contra de estos cambios de nombre en favor de empresas capitalistas, por lo que conlleva de perdida de identidad y de destrucción importante de la historia del club y su memoria colectiva. Muchas veces estos cambios en el nombre también han servido para la reestructuración de los propios estadios, jodiendo las únicas zonas en las que se podía ver el fútbol de pie.

Otra cuestión es la limitación coreográfica a la que se enfrentan muchos de estos grupos alemanes. Por ejemplo, y al igual que en el Estado Español, hay prohibición expresa y muy rigida sobre la utilización en el estadio de bengalas y botes de humo. Sólo se pueden encontrar estos elementos en equipos de divisiones muy inferiores y en algunos equipos de la antigua RDA, donde la ley se aplica de manera menos rígida.

Por ejemplo, los ultras del Dynamo de Dresden celebraron uno de sus aniversarios con un espectacular bengaleo, una de las excepciones que confirma esta regla. También esta prohibido en los viajes de los grupos, según a que estadios (es decir, si hay rivalidad fuerte o no) la prohibición del uso de megáfonos, estandartes, banderones, etc...
A nivel nacional, se han reunido los Ultras pronto para discutir los problemas comunes que les afectan. La primera reunión se remonta a 1998 y asistieron grupos de 15 ciudades. A principios de esta década, en el marco del Pro-reunificación Fans, la acción conjunta en contra de la comercialización del fútbol se formaron: "Pro 15.30" para unificar los horarios de los partidos y "Kein Kick ohne uns" ( "No es un juego sin nosotros") que afirman el lugar de los aficionados en el fútbol. En 2002, 130 representantes de 30 grupos, con los trabajadores del Fanprojekte participaron en la segunda sesión, durante el cual los temas relacionados con la represión y los efectos del fútbol-negocio fueron amplias y constituyeron una plataforma para las reclamaciones conjuntas. Esta plataforma organizó una marcha en Berlin antes de la final de Copa de aquel año a la que acudieron 1.000 personas de muy diversos grupos como muestra de unidad.

Algunas reclamaciones de los ultras son, como hemos dicho, la unificación de los horarios de los encuentros. El mismo día y la misma hora. La prohibición de que cualquier partido finalize más parte de las 20:00 horas o que ante un posible cambio de fechas de algún partido en concreto se avise a todos los aficionados con un mes de antelación como mínimo. También reclamaciones propias como la introducción de elementos pirotécnicos en casa, más facilidades en los viajes respectivos con el acceso de algunos elementos de animación y la denuncia constante contra la represión y los abusos de la policía.

AMISTADES Y ENEMISTADES:

Los ultras han creado a lo largo de los años una serie de relaciones intergrupales. Por ejemplo, los ultras del Karlsruher y del Hertha Berlin comenzaron una amistad entre sus respectivos grupos que, posteriormente, se extendió al resto de ambas aficiones. Otro ejemplo de amistad, en este caso a tres bandas, es el triángulo formado por los hooligans del Mannheim, Braunschweig (Nota al traducir: Probablemente nombres incorrectos) y los suizos del Basel, que posteriormente, también pasaron a los grupos ultras de estos equipos.

También otras relaciones se deterioran con el paso del tiempo. Es el caso de los ultras del Kaiserlautern que han forjado una gran amistad con los ultras del Bielefeld, dando de lado a la vieja amistad entre aficiones que los unía con los seguidores del 1860 Munich.

En el plano internacional, los ultras alemanes han desarrollado una serie de contactos con grupos extranjeros. Grupos franceses de las ciudades fronterizas están vinculadas a grupos de alemanes de los pueblos vecinos: Ultra Boys Estrasburgo con ultras del Karlsruher, Horda Frenetik Metz con Generación Luzifer Kaiserslautern y los ultras del Nancy con los del Saarbrucken. Hubo, incluso, un momento en que el club de fans desaparecido "Blue Pirates" apoyaba tanto al Estrasburgo como al Karlsruher! Otras amistades serían los ultras del Colonia con los Supras Autevil. En el Este, los Ultras Dynamo guardan buena relación con los fans del GKS Katowice polaco y Boys Bielefeld con hooligans del Debrecen húngaro. En el Sur, los ultras del Nurnberg también tienen buena relación con los Supras Autevil del PSG, y en menor medida, el Commando Ultra con los Ultras Nurnberg, y también con un núcleo de Ultra´ St. Pauli. En Italia, los del Karlsruher mantienen buenos contactos con algunos Ultras Pisa.

POLITIZACIÓN LIMITADA:

Desde los años en los que se dió un pequeño "boom" de boneheads animando a determinados equipos alemanes a lo largo de los ´80, la politización ha ido decreciendo. Con excepciones notables, como la del St. Pauli, se podría decir que el movimiento alemán es casí completamente apolíticos.
De hecho, el movimiento alemán es uno de los menos politizados de Europa, comparándolo, sobre todo, con los ultras del Sur y del Este del continente. Algunos grupos, sin embargo, se resisten a inclinarse hacía esa apolitización del movimiento, como los Wilde Horde del Colonia que cuelga siempre de su valla, el rostro del guerrillero "Che" Guevara. Esto ha abierto un debate en Alemania, porque los grupos de gorrinos no podrían expresar de manera tan evidente su adscripción ideológica al estar severamente penadas las expresiones de admiración al regimen nazi.
Si bien, el poso de apoliticismo es evidente entre casí todos los grupos, no lo es la lucha contra el racismo, a la cual se adhieren una amplia mayoria de grupos. Esta tendencia ha sido históricamente abanderada por grupos como Ultras Frankfurt o Ultra´ St. Pauli y seguida por grupos más pequeños como Inferno o Filmstadt Babelseber o incluso por grupos de la ex-RDA como los Diabos Leipzig. Hay grupos, como los del St. Pauli, que van un paso más adelante y no sólo se posicionan contra el racismo, sino contra el fascismo como ideología política, tal caso sería el de los Schickeria Munchen del Bayern. De hecho, la relación entre estos dos grupos se ha visto acrecentada por esta visión política común. También destacar que los primeros organizan en su barrio todos los años un mundialito contra el racismo desde hace varios años.

LA ETERNA DIFERENCIA ESTE-OESTE:

Todavía hay muchas diferencias entre el fútbol de la antigua República Democrática de Alemania y la desaparecida República Federal de Alemania. Sólo un equipo del este estaba en la Bundesliga en la temporada 2006/07, el Cottbus, mientras que el Carl Zeiss Jena y el Hansa Rostock, se conformaban con la segunda división alemana. A causa de este bajo nivel futbolero y de las dificultades económicas en los Lander del Este, la infraestructura de los clubs, incluidos los estadios, son significativamente más bajos entre estos equipos.

Los ultras tampoco han evolucionado de manera igualitaria en ambos lados. Los ultras del lado occidental surgieron a partir de 1995, basicamente como un movimiento copiado de todo lo que se hacía en la época en Francia e Italia, principalmente el tema de las coreografías y tifos. Renunciando, en su mayoría, a la violencia por diversos motivos: el primero la reputación el seno interno del club, el segundo porque la represión se volvería rapidamente contra la escena y sería su aniquilación total y en tercer lugar porque en el lado occidental el movimiento hooligan y el ultra está totalmente dividido y definido. Con el tiempo esta tendencia se ha ido cambiando y ya se han visto algunos incidentes entre grupos del lado occidental. Esto es debido a que también se han cambiado las relaciones que mantenian los grupos con sus respectivos equipos, desde hace algunos años.
En el lado oriental los grupos llegaron algo más tarde, en su mayoría a comienzos del año 2000. Por la proximidad geográfica y, también, por crecer en un contexto socil mucho más duro que en la ex-RFA, el modelo seguido por los ultras es, ante todo, el modelo polaco de animación. Esto es, coreografías y canciones durante todo el partido, pero también utilización continua de la violencia contra otros grupos.
Este diverso contexto social abrió un debate hace unos años en el seno del movimiento alemán, pues los ultras y hools del Este, se ven a ellos mismos como mucho más ingeniosos que sus vecinos ante la falta de medios y, a su vez, acusan a los ultras del lado occidental de estar aburguesados. Esto no es más que un fiel reflejo de la tensión reinante en la sociedad en general. De hecho, muchos ciudadanos del este de Alemania verían con buenos ojos la vuelta a los tiempos de la RDA. En cuestión de violencia, y en lo que se refiere a los grupos ultras, los del este siempre se llevaron la palma, por ejemplo, un total de 238 ultras y hools del Dynamo Dresden tuvieron prohibido el acceso al estadio por peleas en la vuelta del equipo a la segunda división.

Una muestra más de la provocación que ostentan los Ultras Dynamo contra sus vecinos occidentales fue la confección de una pancarta con el lema "Ultras wess aufs Mutilar", literalmente "En tu cara, Ultra occidental". Las letras están hechas con trozos de bufandas y pancartas robados a los grupos de esta zona. Esta fue contestada por la Wilde Horde del Colonia en su visita a Dresde la temporada pasada con dos pancartas-mensaje: "Hecho en Alemania Occidental" y "Unsere Soli. für euch: 100 schals", esto est, "Nuestra solidaridad con ustedes: 100 bufandas" y enseñando a su vez 100 bufandas robadas a grupos del Este en los últimos años.

sábado, 2 de noviembre de 2013

       Derbi francés, duelo de ideologías:


Aunque el Lyon les ha quitado protagonismo en la última década, PSG y Marsella son los dos equipos con más tirón en toda Francia. Ambos protagonizan un duelo de ideologías enfrentadas en todo el país, llevando al extremo sus pensamientos.

No se puede decir con ello que representen a la sociedad de su ciudad, ya que los aficionados más radicales del Paris Saint Germain son de extrema derecha y está claro que en la capital gala no son así.


Sin embargo, los hinchas del OM se acercan algo más a la tendencia de su ciudad. Marsella es una de las ciudades más cosmopolitas de todo el mundo, lo que se nota en los fondos del Velodrome. Se consideran de extrema izquierda y en su lucha está, entre otras cosas, erradicar el racismo, aunque la violencia en muchos casos parece que vaya con ellos.


Durante los derbis se dedican toda serie de insultos y amenazas verbales, lo que provoca que desde mucho antes del partido la policía tenga trabajo en los alrededores del estadio. En Francia, los viajes de los aficionados para acompañar a su equipo también se dan y en este tipo de partidos no son una excepción. En la gran mayoría, los ocupantes de la zona visitante son considerados violentos o ultras por lo que el peligro ante tales partidos es grande.

Commando Ultra 84 es uno de los grupos ultras del Marsella. Se sitúa en el fondo sur y tiene más de 5.000 socios a sus espaldas. Uno de sus cabecillas es el famoso Santos Mirasierra. Sin embargo este no es el único grupo marsellés. Hay un total de 6 y su número de socios en total ronda los 20.000. Controlan cada uno de sus socios y gestionan el dinero de los abonos de sus respectivas gradas, por lo que sus posibilidades económicas y su poder es bastante elevado.


En el Parque de los Príncipes cada uno sabe donde tiene que ponerse. En uno de los fondos están los ultras de extrema derecha, es el fondo de Kop Boulogne. En el otro, Virage Auteil, están otros grupos que no comparten mayoritariamente esas ideas y que no son tan radicales. Cada fondo llega a representar a dos barrios de la capital francesa.





Son dos caras de vivir el fútbol relacionándolo con un aspecto con el que el deporte no se debe identificar: la política. Sin embargo, detrás de cada pancarta y de cada lema, siempre hay una ideología que defender y esto en Francia se ve muy claro en el partido más importante del año: Marsella-PSG o viceversa.





Tres equipos de Berlín, tres historias de fútbol.



Tan disímiles en nombre como en trayectoria, BFC Dynamo, 1. FC Union Berlin y Hertha BSC son clubes de fútbol que hallan en el orgullo de representar a Berlín su único punto de convergencia. El resto de sus particulares desarrollos, como si se tratara de trillizos que son separados de la madre apenas llegaron al mundo, apenas y observa alguna coincidencia. Aquí una semblanza única para tres perfiles distintos...

BFC Dynamo, 1. FC Union Berlin y Hertha BSC:

Parte intrínseca de su historia, los tres equipos de fútbol más representativos de Berlín han pasado también por épocas variadas en las que acciones encomiables se han alternado con sucesos tan inexplicables como contradictorios.

Sus escudos han sido honrados con las más altas glorias y humillados con los más rotundos fracasos pero, al igual que la ciudad en la que nacieron, encontraron en su propia reinvención un medio de supervivencia.

Respetuosos de la tradición que los respalda, pero al mismo tiempo negados a la idea de vivir del pasado, esta tríada deportiva continúa inamovible en lo único que da sentido a su existencia: jugar al fútbol.

Tan disímiles en nombre como en trayectoria, BFC Dyanmo, 1. FC Union Berlin y Hertha BSC son clubes que hallan en el orgullo de representar a Berlín su único punto de convergencia. El resto de sus particulares desarrollos, como si se tratara de trillizos que son separados de la madre apenas llegaron al mundo, apenas y observa alguna coincidencia.

En realidad sobresalen o al menos se antojan más interesantes sus diferencias, fomentadas no tanto dentro de la cancha como fuera, incapaces de comprenderse sin conocer los hechos históricos más importantes que han tenido lugar en Berlín.

Es probable que ninguno de los equipos de cualquier otra región alemana, y probablemente del mundo, se muestre tan unida al destino de la ciudad que le dio origen.

A continuación revisaremos algunos fragmentos de la historia pretérita de cada una de estas escuadras, los acontecimientos que las han convertido en amigos o en férreos rivales, los nombres de los jugadores que han quedado en la memoria de miles de fanáticos. Y también de su presente, digno de mencionarse –y de celebrarse- no porque se halle o no lleno de triunfos sino porque siquiera, y en ocasiones contra todo pronóstico, persiste.

Un inicio:

Empezaremos con Hertha BSC, el único de estos tres equipos que posee el honor de pertenecer actualmente a la 1. Bundesliga (primera división el fútbol alemán). Si ya de por sí el origen de su nombre es poco convencional –Hertha es una de las variaciones que tiene el nombre Nerthus, diosa de la fertilidad en la mitología alemana-, éste se queda muy atrás si se le compara con las razones por las que su característico uniforme es azul y blanco: uno de los hombres que fundó el equipo vio esa combinación de colores en la chimenea de un barco de vapor y le gustó.

Hablamos del año 1892 y en realidad eso de “hombre” es un decir, pues el grupo de fundadores estaba compuesto por adolescentes tan jóvenes que se vieron en la necesidad de pedir al tío de uno de ellos que fungiera como presidente del club.

Desde un principio los jugadores que lo integraron mostraron un estilo propio y efectivo y ya para 1905 habían ganado el campeonato de Berlín. Posteriormente tendrían problemas financieros pero ni eso impidió que entraran a la Oberliga Berlín-Brandenburgo, donde fueron líderes por siete veces consecutivas –de 1925 a 1931, y todavía ganarían nuevamente en 1933-. Desde dicha posición pelearon la final de campeonato alemán seis veces –de 1926 a 1931-, consiguiendo el triunfo únicamente en las temporadas de 1930 y 1931.

También el equipo Union de Berlín ha dado pelea por más de una centuria aunque, dada su complicada evolución a través del tiempo, y sobre la que hablaremos más adelante, se antoja doblemente antiguo. De hecho el nombre de SC Union no le fue concedido sino algunos años después de que se registrara con su apelativo original, SC Olympia 06 Oberschöneweide (este último, el nombre de un distrito en Berlín), hecho que tuvo lugar en 1906.

Desde un inicio apodados “Schlosserjungs” (algo así como “los chicos cerrajeros”), gozaron pronto del apoyo de la clase obrera. De hecho, se dice que el color azul que adoptaron en ese entonces para su uniforme había sido inspirado en los overoles de los trabajadores del metal que había en la región.

Caracterizado por su gran empuje, el equipo pronto adquirió fuerza en la época llamada de “entre guerras”. Incluso llegó a la final del campeonato de Alemania en 1923, misma que perdió ante el Hamburger SV.

Por su parte, el nacimiento del BFC Dynamo no pudo ser más distinto que el de sus “hermanos” berlineses. De acuerdo a su página web oficial, el día en que se considera su fundación es el 15 de enero de 1966, aunque sus orígenes pueden ubicarse desde 1949, cuando algunos miembros de la Volkspolizei (Policía del Pueblo), manera en que se designaba al cuerpo policíaco de la República Democrática Alemana (RDA), deciden fundar una escuadra de fútbol.

De allí que a nadie extrañe el hecho de que el club contara en todo momento con el apoyo del sector oficial de la RDA dentro de los confines de un país todavía dividido.

Una vez rebautizado con el nombre con el que se le conoce ahora, y conformado por jugadores vestidos con los colores rojo vino y blanco que lo caracterizan, el equipo fue prácticamente imbatible en la primera división de la RDA, ganando diez torneos consecutivos –de 1979 a 1988-.

Sobra decir que ésta es considerada una época oscura en la historia del club, pues ya entonces se sabía que algunos partidos se amañaban a su favor, siendo que la cúpula de poder de la RDA, incluyendo algunos miembros de la Stasi (agencia de seguridad estatal: Ministerium für Staatssicherheit), así lo habían decidido. Por extraño que pueda parecer, sus tentáculos de poder se extendían incluso hacia lo que sucedía dentro del terreno de juego.

Modificaciones durante la Guerra Fría y tras la Reunificación:

En su calidad de portavoces futbolísticos de la capital, al menos en el caso del Hertha y el Union, éstos ya habían sufrido modificaciones considerables al término de la Segunda Guerra Mundial, cuando todas las instituciones alemanas, incluyendo las deportivas, fueron cesadas y sometidas a un proceso de reestructuración.

En cualquier caso, ambos equipos se las arreglaron para sobrevivir y adaptarse a los cambios. En el caso del Hertha, con sede en Berlín Occidental, éste fue uno de los equipos fundadores de la Bundesliga en 1963.

Otra sería la situación del Union, equipo que sería disputado por ambas fracciones de la Berlín dividida hasta que finalmente se opta por la creación de dos equipos: el Sport Club Union 06 Berlin para el Oeste, cuyo juego sinceramente nunca destacó (de hecho aún existe, aunque juega en el circuito de las ligas amateurs de Berlín) y el 1. FC Union Berlin para el Este, equipo que se integró en 1966 a la primera división de la RDA y que, dada su tradicional identificación con las clases trabajadoras, desarrolló una rivalidad insalvable con el oficialista Dynamo, a sus ojos –y el de sus hinchas- considerado “el equipo de la Stasi”.

Tras la caída del Muro en 1989 y la posterior reunificación un año después, los clubes de fútbol, sobre todos los que pertenecían a la RDA, nuevamente fueron motivo de reajustes que, al menos en el caso de Union y Dynamo, dada su endeble situación financiera, entre otras cosas, no jugaron necesariamente a su favor.

El primero, por ejemplo, observó tremendas dificultades para formar parte de la 2. Bundesliga (segunda división alemana), hasta conseguirlo para la temporada 1998-99, mientras que el Dynamo sufrió descalabros deportivos y estructurales que incluyeron cambios de nombres hasta finalmente ubicarse en la NOFV Oberliga Nord, cuarta división del futbol alemán (quinta ya, si consideramos la entrada en vigor de la 3. Bundesliga, inaugurada en la campaña 2008-2009), de la que todavía forma parte.

Jugadores, estadios, fanáticos:

No cualquier equipo puede presumir el tener como estadio sede el famosísimo Olympiastadion de Berlín, con capacidad para unos 75,000 espectadores. Hertha y los alrededor de 55,000 fanáticos promedio que acuden a sus partidos lo hacen llenando el espacio con sus cánticos.

A esa memoria colectiva teñida de blanquiazul se aferran nombres legendarios como el de Michael Preetz, líder de goleo de la Bundesliga en la temporada 1998-99 o el brasileño Marcelinho, artillero imparable que de 2001 a 2006 hizo suyos las zapatillas y los peinados multicolores.Pero también el Union cuenta con jugadores destacables como el centrocampista Reinhard Lauck, cariñosamente apodado “Mäcki”, berlinés incansable que se movía por toda la cancha y al que entrenadores e hinchas por igual amaron tras su contratación –en 1968- y odiaron con toda su alma luego de 1973, cuando en un acto incomprensible se pasó al bando de los detestados Dynamo.

Como sea, él y otros futbolistas de abolengo dejaron su marca sobre el césped del Stadion An der Alten Försterei, cancha que la escuadra utiliza desde agosto de 1920 y que ha pasado por diversas remodelaciones hasta dejar un espacio apto para 19,000 espectadores, todos listos para elevar el acostumbrado grito de batalla, “Eisern Union” (¡Hierro Unión!), en los encuentros de su equipo, actualmente uno de los dieciocho que integran la 2. Bundesliga.

Como todo club de innegable tradición, Dynamo cuenta asimismo con su estadio, el Sportforum Hohenschönhausen –por eso, además de “los Wine Reds” también llevan el apodo de “Hohenschönhauseners” o “los de Hohenshönhausern”, que es el nombre del distrito en el que se encuentra el campo-, el cual fue construido en 1970 y tiene una capacidad para alrededor de 10,000 espectadores.

Pese a que su pasado no es precisamente motivo de presunción, sí lo es la calidad de algunos de los jugadores que ha habido entre sus filas, entre ellos Thomas Doll, destacado mediocampista ofensivo que portó la camiseta roja y vino hasta 1989 –tras la reunificación sería contratado por el Hamburger SV- o Andreas Thom, delantero que cedió sus poderosas piernas a la causa de 1980 a 1989, cuando es adquirido por el Bayer 04 Leverkusen.

Finalmente producto de su tiempo, ambos jugarían para el equipo de la Alemania reunificada en la década de los noventa.

Tiempo extra:



Si hay algo que no puede negarse a ninguno de estos tres equipos es el respeto que continúan demostrando a sus seguidores y, por ende, a su propia tradición.

Lo de menos es que en la actualidad peleen en ligas distintas o que su nivel de juego sea cada vez menos equiparable. Tampoco importan ya las glorias pasadas, aquellos años en los que, con trampas o no, Dynamo era el súper líder de la RDA y Union el persistente rival honrado –en cualquier caso uno no se entiende sin el otro-, ni aquel período entre guerras donde la sola mención del Hertha provocaba muestras de júbilo entre incontables berlineses.

Lo destacable es que esta singular tríada deportiva encontró el modo de seguir en la contienda, de subsistir a pesar de los obstáculos, ya los propios que conlleva el juego, ya los que nada tuvieron que ver con el fútbol y que, valga decirlo, no fueron pocos ni fáciles de superar.


De eso sabe mucho esta tríada de escuadras porque en ellas, como en otras cosas más, Berlín halla el reflejo de su historia.



sábado, 3 de agosto de 2013

                             Ciriaco Sforza



Ciriaco "Ciri" Sforza (2 de marzo de 1970), es un ex-futbolista suizo, actualmente ejerce de entrenador. Se desempeñaba como centrocampista y su último club fue el FC Kaiserslautern.

Nacido en Wohlen, Sforza empezó jugando en el club de su ciudad natal, el FC Wohlen, fichando en 1989 por el FC Aarau, en solo una temporada logró convertirse en uno de los jugadores más deseados de Suiza, así que en 1990 fichó por el Grasshoppers, ya al año siguiente debutó con la selección de fútbol de Suiza.


En 1993, Sforza fichó por el FC Kaiserslautern de Alemania y pronto se ganó la reputación de ser uno de los mejores centrocampistas de la Bundesliga alemana. Tras dos temporadas en el club de Kaiserslautern, Sforza fichó por el gigante germano del Bayern de Múnich junto a Jürgen Klinsmann. Por aquellos tiempos, conflictos entre el capitán Lothar Matthäus y el propio Klinsmann hicieron que el clima del club bávaro fuera muy tenso, por ello fue apodado FC Hollywood. Sin embargo, ese año el Bayern logró ganar la Copa de la UEFA con Ciri Sforza como pilar del equipo.


Tras una temporada convulsa, Sforza se mudó al Calcio italiano fichando por el Inter de Milán, como petición expresa del entrenador Roy Hodgson, Sforza tuvo muchos problemas de aclimatación al equipo y se convirtió en un habitual del banquillo. Para la siguiente temporada (1997-98), Sforza regresó a la Bundesliga fichando por su antiguo club, el FC Kaiserslautern.


Sforza fue recibido como un ídolo, y pese a que el Kaiserslautern había acabado de ascender desde la 2. Bundesliga, ganó el campeonato alemán de la temporada 1997-98, logrando acabar delante del todopoderoso Bayern de Múnich.

En el año 2000, Sforza regresó al Bayern dándole otra oportunidad al club. En un equipo plagado de estrellas, Sforza se vio relegado al banquillo y su participación en las dos temporadas que permaneció en el equipo fueron muy escasas, no obstante ganó una UEFA Champions League y la Bundesliga en el 2001. En el 2002 y tras finalizar su contrato con el Bayern, regresó por tercera vez al Kaiserslautern. Problemas con lesiones y escándalos hicieron su tercer paso por el club no tan recordado como los dos anteriores, finalmente se retiró en el verano de 2006.


La carrera de Ciriaco Sforza está, inevitablemente ligada a tres equipos: el Grasshopper, el Kaiserslautern y el Bayern Munich. Sforza ha jugado en varias etapas en todos ellos, en tres etapas en el Kaiserslautern y en dos en Grasshopper y Bayern. Con la selección disputó el Mundial de 1994 y la Eurocopa de 1996. Llegó a disputar 79 partidos con la selección helvética, en los que consiguió 6 goles.





martes, 9 de julio de 2013

                            Vassilis Tsartas



Vassilis Tstartas fue un jugador griego de fútbol (actualmente retirado) cuya posición era centrocampista y mediapunta. Se caracterizó por su maestría al ejecutar los tiros libres, y su afán por ser importante. En el Sevilla FC fue uno de los grandes de su tiempo y era considerado un divo ya que consiguió una veintena de goles y muchísimas asistencias, también por ser uno de los artífices del ascenso en junio del año 1999, estando a punto incluso de marcar el la promoción de ascenso contra el Villarreal CF. Tuvo que salir del Sevilla por falta de dinero del mismo.

Tsartas debuta en el AEK Atenas FC griego en julio de 1992 consiguiendo en este equipo 2 Ligas y 1 Copa. En julio de 1996 abandona el club tras fichar por el Sevilla FC.


En julio de 1996 el Sevilla FC (España) logra fichar al jugador, permaneciendo en el club hasta el verano del año 2000 cuando el club tiene que traspasarlo por problemas económicos.


En el verano del 2000 Tsartas regresas al AEK debido a la crisis por la que pasaba el Sevilla FC. Durante esta etapa volvió a ganar la Copa Griega en 2002.


Su logro más importante con su selección nacional fue la consecución de la Eurocopa 2004 de Portugal, siendo destacado como el jugador con más calidad de ese combinado. Jugó 70 partidos como internacional y marcó 12 goles.


Como curiosidad también os contaré que estuvo a punto de fichar por el Racing de Santander en 1997, pero finalmente se quedó en Sevilla.2 años más tarde el equipo que pretendió su fichaje fue el Real Madrid, pero finalmente el Sevilla logró retenerlo.


Otra curiosidad es la historia que el propio Tsartas cuenta; Cuando estaba en el Sevilla recomendó fichar a un jovencísimo Rubén Baraja y a Roy Makaay, pero finalmente los fichajes no llegaron y en su lugar se fichó a Jorge Otero.


jueves, 27 de junio de 2013

                           Fútbol gaélico



El fútbol gaélico o balón pesado (en irlandés, Peil Ghaelach o Caid) es un deporte de equipo que se juega fundamentalmente en Irlanda. Es el más popular del país, junto con el Hurling. El fútbol gaélico se juega en equipos de 15 jugadores en una cancha de césped rectangular con porterías en forma de H a ambos lados. El objetivo principal es anotar puntos pateando o golpeando el balón con las manos e introducirla en la portería rival. El equipo con más puntos al final del encuentro gana.

Los jugadores avanzan por el campo llevando el balón en sus manos, pateándolo y pasándolo entre compañeros de equipo.


El fútbol gaélico o balón pesado es uno de los cuatro Juegos Gaélicos regulados por la Asociación Atlética Gaélica, la mayor y más popular organización de este tipo en Irlanda. Posee reglas estrictas acerca de la condición amateur de los jugadores. La GAA organiza cada año las competiciones entre clubs y entre condados, de las cuales las más importantes son:

La National Football League, que se disputa entre condados cada año entre febrero y abril desde 1926.

Los Campeonatos Provinciales, que se disputan en formato de eliminatoria directa a partido único desde mayo a julio entre condados.

El All-Ireland Football Championship, que comienza con los Campeonatos Provinciales y termina en septiembre. Este torneo es el torneo más prestigioso y antiguo (1887) de este deporte, y se disputa también entre condados.

Se cree que el juego proviene del antiguo fútbol irlandés conocido como caid, que se remonta al 1537, aunque el juego actual tomó forma en 1887.

Campo de juego:

El campo es rectangular, de entre 130 y 145 metros de largo y entre 80 y 90 metros de ancho. Hay porterías con forma de H a ambos lados con una red en la parte inferior. El mismo campo se usa para hurling; la GAA, que regula ambos deportes, decidió esto para permitir que se jueguen ambos deportes en un solo campo. Las líneas están marcadas a 13, 20 y 45 metros de cada extremo. Se utilizan campos y porterías menores para niños de menos de 14 años.


Duración:

Todos los partidos duran 60 minutos, dividos en dos mitades de media hora cada una, con la excepción de partidos senior entre condados, que duran 70 minutos (dos mitades de 35). Los empates se deciden jugando otra vez o añadiendo 20 minutos de tiempo adicional en dos mitades de 10 minutos.

Equipos:

Cada equipo posee 15 jugadores (un portero, dos corner-backs, un full-back, tres half-backs, dos centrocampistas, tres half-forwards, dos corner-forwards y un full-forward) y hasta 15 suplentes, de los cuales se pueden utilizar 5. Cada jugador se numera entre el 1 y el 15, comenzando con el portero, que debe utilizar una camiseta de otro color.

El balón:

Se utiliza un balón de cuero, similar a uno de fútbol, pero ligeramente más pesado, y con gajos horizontales, no con hexágonos o pentágonos, y similares en apariencia a balones de voleibol. Se puede patear, así como ejecutar pases con las manos. Para realizar esto se golpea la pelota con los nudillos o el pulgar.


Puntuación:

Si el balón pasa por encima del travesaño, se anota un punto y un juez levanta una bandera blanca; si pasa por debajo se anota un gol equivalente a tres puntos y un juez levanta una bandera verde. La portería está protegida por el portero. El resultado se registra con el formato {total de goles} - {total de puntos}.Por ejemplo, si un equipo marca 1 gol y 14 puntos, su resultado total son 17 puntos. El equipo que gana es el que alcanza la mayor puntuación total.

Placajes:

Se permiten placajes (o tackles) más duros que en fútbol, pero menos que los de rugby.

Se permite golpear la pelota de las manos del rival o empujarlo con los hombros, pero las jugadas siguientes son consideradas faltas:

Usar ambas manos para realizar un placaje.
Empujar a un rival.
Derribar a un rival.
Tomar un oponente de la camiseta.
Bloquear un tiro con los pies.
Realizar un placaje deslizándose.
Tocar al portero en el área chica.
Forcejear un balón que está en las manos del rival.

Se cree que el juego proviene del antiguo fútbol irlandés conocido como caid, que se remonta al 1537, aunque el juego actual se organizó de modo formal en el siglo XIX gracias a las reglas establecidas por la Asociación Atlética Gaélica (Gaelic Athletic Association GAA) en 1887. Existen ligas masculina y femenina. Las finales de fútbol gaélico (All-Ireland Final) tienen lugar el tercer domingo de septiembre en el estadio Croke Park en la categoría sénior y junior (menores de dieciocho años). El ganador del campeonato masculino sénior recibe la copa Sam Maguire.


El condado que más veces ha ganado la final en la historia del fútbol masculino es Kerry con 36 copas, seguido de Dublin con 22.

Fuera de Irlanda, encontramos clubs de deportes gaélicos asociados en Asia, Australasia, Canadá, Estados Unidos, Europa continental y Gran Bretaña. Si bien las normas de juego de cada campeonato son las mismas, la organización del campeonato es diferente en distintas zonas.


Los equipos de Asia-Pacífico (a excepción de Nueva Zelanda y Australia) y la región del Golfo se organizan bajo el Comité Regional de Asia (Asian County Board o Asian GAA).

Anualmente organiza un campeonato, la copa Asia (Asian Gaelic Games), que enfrenta a los equipos de todos los países de su jurisdicción para encontrar al campeón de Asia. La copa Asia se ubica cada año en un país diferente.

El Comité Regional de Australia (Australia County Board o Australia GAA) es uno de los comités regionales de la GAA fuera de Irlanda y se encarga de organizar los deportes gaélicos en Australia y Nueva Zelanda.

El comité se subdivide por regiones en Nueva Gales del Sur, Nueva Zelanda, Queensland, Australia Meridional, Victoria y Australia Occidental.

El Comité Regional de Canadá (Canadian County Board o Canada GAA) es uno de los comités regionales fuera de Irlanda que se encarga de organizar los deportes gaélicos en Canadá.

Hay un total de quince clubes afiliados repartidos por diez ciudades de Canadá. En algunas épocas, los clubes de Toronto y Ottawa han competido en la liga de la NACB.

El Comité Regional de América del Norte (NACB o North American GAA) es uno de los comités regionales fuera de Irlanda y se ocupa de los deportes gaélicos en todo Estados Unidos excepto la ciudad de Nueva York, que está controlada por el GAA de Nueva York.

En 2005, había 110 clubs registrados repartidos en más de 30 ciudades del área de la NACB. Estos clubes participan en campeonatos por división que les cualifican para la final norteamericana en sus respectivos deportes y niveles de competición.

En España hay los siguientes equipos de fútbol gaélico: Barcelona Gaels,Madrid Harps,Sant Vicent GAA (Valencia), Marbella Costa Gaels, A Coruña Fillos de Breogán, Eire Og Sevilla, Gibraltar Gaels, Irmandinhos A Estrada, Mecos Ogrobe, Madrid O'Donnells y Ártabros de Oleiros.

En Galicia cuentan, además de con los mencionados arriba, los siguientes equipos: Suévia FG de Compostela, Afiadores/as de Ourense, Torques de Lugoslávia de Lugo y Cascarilha de Coruña.

El Comité Británico de la GAA (en irlandés: Cumann Lúthchleas Gael An Bhreatain) organiza los deportes gaélicos en Gran Bretaña. El Comité Británico es responsable de las siete regiones de Gran Bretaña (Escocia se cuenta como región y no como país).


Londres compite en el Campeonato de Hurling de All-Ireland com parte de Ulster y en el Campeonato de Fútbol All-Ireland como parte de Connacht.